OTHER MARCHES IN HISTORY

- GANDHI Y LA MARCHA DE LA SAL -
- MARTIN LUTHER KING, JR. -
- LOS CHICOS DEL PUEBLO -


Gandhi y la marcha de la sal 

El 12 de marzo de 1930, Gandhi empieza "la marcha de la sal" de 380 Km. Desde Sabarmati a Dandi. En ella se pedía la abolición de la tasa sobre la sal, que costaba a los indios 115 millones de francos-oro al año. Todos los grandes periódicos del mundo publicaban el espectáculo de este extraño cortejo. 26 días más tarde Gandhi recogía sal del océano Indico e invitaba a la población a hacer lo mismo.

El 5 de mayo organiza una excursión al depósito gubernamental de sal de Dharasana, donde es de nuevo detenido. 2.500 voluntarios se presentan pacíficamente delante de las fuerzas de policía que custodian la sal y son recibidos a garrotazos (dos muertos y 300 heridos). Cerca de 100.000 indios son encarcelados; pero no se puede mantener encarcelados mucho tiempo a tal cantidad de militantes.

En enero de 1931 el Virrey Lord Irwin pone en libertad a los líderes del Congreso e invita a Gandhi a conversar con él. El 4 de marzo de 1931 el virrey libera a todos los presos políticos, restituye todas las propiedades confiscadas a los indios y abolió las leyes sobre la sal, mientras que Gandhi pone fin a la desobediencia civil. El Mahatma va en septiembre a Londres para participar en la Conferencia de la Mesa Redonda, pero vuelve con las manos vacías. Algunos meses después el nuevo gobierno conservador de Londres, dirigido por Churchill, da la orden de aplastar el Congreso. De nuevo cerca de 100.000 militantes son encarcelados, pero Gandhi, en contra de la opinión de sus allegados empieza una huelga de hambre que hace ceder al gobierno británico.

En 1936, los indios pueden elegir un parlamento; el partido del Congreso obtiene una mayoría aplastante. 



Martin Luther King, Jr.

Al final de la Marcha sobre Washington por el Trabajo y la Libertad, que tuvo lugar el 28 de agosto de 1963, Martin Luther King pronunció el discurso conocido por una de las expresiones clave del mismo: “I have a dream”, “Tengo un sueño”.

Tengo un sueño

"(…) No nos hundamos en el valle de la desesperación. Aun así, aunque vemos delante las dificultades de hoy y mañana, amigos míos, os digo hoy: todavía tengo un sueño. Es un sueño profundamente enraizado en el sueño americano.

Tengo un sueño: que un día esta nación se pondrá en pie y realizará el verdadero significado de su credo: “Sostenemos que estas verdades son evidentes por sí mismas: que todos los hombres han sido creados iguales”.

Tengo un sueño: que un día sobre las colinas rojas de Georgia los hijos de quienes fueron esclavos y los hijos de quienes fueron propietarios de esclavos serán capaces de sentarse juntos en la mesa de la fraternidad.

Tengo un sueño: que un día incluso el estado de Mississippi, un estado sofocante por el calor de la injusticia, sofocante por el calor de la opresión, se transformará en un oasis de libertad y justicia.

Tengo un sueño: que mis cuatro hijos vivirán un día en una nación en la que no serán juzgados por el color de su piel sino por su reputación.

Tengo un sueño hoy.

Tengo un sueño: que un día allá abajo en Alabama, con sus racistas despiadados, con su gobernador que tiene los labios goteando con las palabras de interposición y anulación, que un día, justo allí en Alabama niños negros y niñas negras podrán darse la mano con niños blancos y niñas blancas, como hermanas y hermanos.

Tengo un sueño hoy.

Tengo un sueño: que un día todo valle será alzado y toda colina y montaña será bajada, los lugares escarpados se harán llanos y los lugares tortuosos se enderezarán y la gloria del Señor se mostrará y toda la carne juntamente la verá.

Ésta es nuestra esperanza. Ésta es la fe con la que yo vuelvo al Sur. Con esta fe seremos capaces de cortar de la montaña de desesperación una piedra de esperanza. Con esta fe seremos capaces de transformar las chirriantes disonancias de nuestra nación en una hermosa sinfonía de fraternidad. Con esta fe seremos capaces de trabajar juntos, de rezar juntos, de luchar juntos, de ir a la cárcel juntos, de ponernos de pie juntos por la libertad, sabiendo que un día seremos libres.

Éste será el día, éste será el día en el que todos los hijos de Dios podrán cantar con un nuevo significado “Tierra mía, es a ti, dulce tierra de libertad, a ti te canto. Tierra donde mi padre ha muerto, tierra del orgullo del peregrino, desde cada ladera suene la libertad”.

Y si América va a ser una gran nación, esto tiene que llegar a ser verdad. Y así, suene la libertad desde las prodigiosas cumbres de las colinas de New Hampshire. Suene la libertad desde las enormes montañas de Nueva York. Suene la libertad desde los elevados Alleghenies de Pennsylvania.

Suene la libertad desde las Rocosas cubiertas de nieve de Colorado. Suene la libertad desde las curvas vertientes de California.

Pero no sólo eso; suene la libertad desde la Montaña de Piedra de Georgia.

Suene la libertad desde el Monte Lookout de Tennessee.

Suene la libertad desde cada colina y cada topera de Mississippi, desde cada ladera.

Suene la libertad. Y cuando esto ocurra y cuando permitamos que la libertad suene, cuando la dejemos sonar desde cada pueblo y cada aldea, desde cada estado y cada ciudad, podremos acelerar la llegada de aquel día en el que todos los hijos de Dios, hombres blancos y hombres negros, judíos y gentiles, protestantes y católicos, serán capaces de juntar las manos y cantar con las palabras del viejo espiritual negro: “¡Al fin libres! ¡Al fin libres! ¡Gracias a Dios Todopoderoso, somos al fin libres!”




Los chicos del pueblo
COMENZÓ LA MARCHA DE LOS CHICOS DEL PUEBLO VIAJE AL CENTRO DE LA CONCIENCIA ARGENTINA

Cien chicas y chicos paraguayos recibieron a las pibas y pibes de la marcha que viaja al centro de la conciencia argentina. Fue el domingo seis de mayo, los cuatrocientos Chicos del Pueblo, a bordo y abrigados en siete colectivos, llegaron a las cataratas del Iguazú, se alojaron en el Club Central y allí eran esperados por los paraguayitos de la CONNAT´s.

En la mañana del lunes, con una lluvia permanente de fondo, Marcelo Martorell, obispo de la ciudad ubicada en el extremo noreste argentino, bendijo la marcha y les pidió a los pibes que lleven un mensaje claro: "Ningún gobernante puede dejar que los niños mueran de hambre".

Los chicos paraguayos, mientras tanto, desplegaron una bandera donde se leía que "con hambre: ni paz ni justicia. Con trabajo digno no hay explotación". Entre todos cantaban: "alerta, alerta, alerta que caminan, los chicos organizados por América latina". También estaban sesenta y cinco chicos guaraníes de Fortín Mbororé, los descendientes de los pueblos originarios, aquellos que soñaron con el aguyje, la Tierra Sin Mal y cuyas comunidades, el año pasado en sólo un mes, sufrieron la muerte de diecisiete niños como consecuencia de la desnutrición.

Ellos, los pibes guaraníes cantaron en su dulce lengua madre saludando la esperanza, la naturaleza y la rebeldía. - Los niños son la vida, la alegría. Eso es Dios. El hambre no es voluntad de Dios y Puerto Iguazú se suma a la lucha del Movimiento Nacional de los Chicos del Pueblo -dijo la hermana Adela María Helguera, una permanente luchadora contra los crucificadores cotidianos. Y por eso es que con los chicos marchan tantos compañeros, como Víctor de Gennaro de la CTA; Carlos Chile, el Coordinador Nacional del MTL (Movimiento Territorial de Liberación); un contingente de niños y compañeros de la CCC (Corriente Clasista y Combativa), así como las Madres de Plaza de Mayo de Santa Fe, las entrañables Queca Koffman y Norma Wekler, como ya lo hicieron en la última marcha.

Asimismo pusieron su cuerpo y se comprometieron distintos integrantes de la Pastoral Social de Misiones; Carlos Graglia, Secretario General de la CTA Misiones y otros compañeros de la organización; Roberto Baradel, Secretario General de SUTEBA; Ana Villarreal, Secretaria de Derechos Humanos de la UTPBA; compañeros de ATE Misiones, del gremio docente de esta provincia, judiciales misioneros y Carlos March, responsable de la oficina AVINA de Buenos Aires.

El almuerzo se hizo en Wanda. La comida fue servida en el Sindicato Papelero de la localidad y participaron escuelas, iglesias y toda la comunidad. Fue emocionante la presencia de los motosierristas de Wanda que desde hace meses están en conflicto contra sus patronales y que hoy se abrazaron con las pibas y pibes de la Marcha con sus respectivos hijos.

Por la tarde, ya en el mítico Eldorado, se hizo un acto en el Centro Cultural Cooperativo del que participaron integrantes de las localidades de Puerto Esperanza, Montecarlo e Irigoyen. Gerardo Segovia, uno de los referentes de la Pastoral Social, sostuvo: "No pudimos ponerle la frutilla al postre marchando por la ciudad, pero el trabajo que atravesó la conciencia de los 36 barrios e instituciones, solo una lluvia de quince horas seguidas pudo parar. Después de esta experiencia los barrios no van a ser los mismos". Francisco, un pibe de once años, agregó: "El encuentro en la Marcha pasada del 2002 marcó nuestras vidas y nuestras conciencias". También arrimaron los trabajos, las consignas y los sueños de la pibada de los barrios de Eldorado. "Seguimos con la lucha de nuestros 30 mil desaparecidos que hoy están acá en cada niño. Estos chicos harán una nueva Argentina. Si servimos como puente entre nuestros desaparecidos y estos niños, eso nos llena de alegría. Hasta la victoria siempre", cerró el acto la maestra y Madre de Plaza de Mayo de Santa Fe, Queca Koffman. Después vinieron los títeres, la música, las canciones y las risas permanentes de las pibas y pibes del pueblo.

Mañana martes, la cita será en la plaza 9 de Julio de Posadas. Puerto Iguazú y Eldorado Zona de pobreza sembrada e impuesta, Puerto Iguazú es la cuna del hambre de los niños guaraníes, en comunidades como Fortín Mbororé. Así como Eldorado, que más allá de su historia lejana, hoy deja ver los estragos de los proyectos económicos y políticos de los ?90. Cuentan que Eldorado es la ciudad argentina que más madera exporta. Tiene alrededor de setenta aserraderos que venden a los Estados Unidos, Japón, España e Israel. Durante 2005 hubo despidos masivos a raíz de la explotación intensiva de los recursos naturales y también de los humanos.

Pensar que alguna vez la ciudad fue llamada "la capital del trabajo". Una cifra expresa el tamaño de la deforestación irracional: hace décadas la selva ocupaba una superficie de un millón de kilómetros cuadrados, ahora, solamente quedan 58 mil kilómetros cuadrados.

En esta tierra estragada, desde el Ministerio de Salud Pública de Misiones sostienen que del total global de aborígenes que residen en la provincia, el 57 por ciento de los niños está desnutrido, el 40 por ciento no está documentado, el 60 por ciento es analfabeto y el 43 por ciento padece desnutrición crónica. Por eso desde Puerto Iguazú y Eldorado parte la Marcha de los Chicos del Pueblo. Símbolo de la necesidad de volver al origen, al territorio donde chicas y chicos eran sagrados y donde, ahora, parecen ser víctimas de una guerra que los tiene como blancos preferidos. Puerto Iguazú, Eldorado. Son como una esperanza colectiva inconclusa, dolorosa pesadilla cotidiana. Aquí están los espíritus rebeldes de la yerba y los duendes buenos de la tierra colorada, las abuelas guaraníes y las muchachas artiguistas; todos están con los hijos del pueblo los que no se resignan e insisten en la construcción de un país para todos.

Canciones preparadas por los niños de Misiones: Marcha de los niños y niñas del pueblo (Música de El Murguero, de los Auténticos Decadentes) La marcha de los niños Llena de pibes de nuestro pueblo Llega para Misiones con sus dolores y grandes sueños Llega con la esperanza con este grito muy popular "No queremos más niños que sufran hambre, que criminal" Estribillo: Venimos para marchar, para marchar, para marchar. Venimos a denunciar, a denunciar, a denunciar. Marchamos para bailar, para bailar, para bailar. Marchamos para soñar, para soñar, para soñar. Estamos muy convencidos que esta marcha no terminó La lucha por los derechos Hace ya tiempo que comenzó Queremos dejarle a todos un camino esperanzador que luchemos todos juntos para nuestra liberación.

Escúchame Bien Misiones (Música del Chamamé Kilómetro 11) Escúchame bien Misiones Lo que te voy a decir Para que esta marcha Le pique a tu gurí En el barrio hay que invitar A todo la gurisada Que cuentan su realidad Y canten con su verdad El dolor hay que compartir Para que no se acumule Y acabar con el hambre Que trae la enfermedad Pero a pesar de todo Las cosas siguen igual No hay que bajar los brazos La fuerza hay que renovar Denunciar las cosas te puede ayudar Pero el silencio Te va a hacer mal Anda a la marcha Para compartir Los sueños como construi
r.