Ayer, los circulantes tuvimos que hacer más esfuerzo para levantarnos, ya que nos despertamos media hora antes (demasiado para nosotros porque nos encanta dormir) porque nos tocaba difundir en algunas parroquias de Vigo.
Algunos tuvieron la suerte de ir en coche, otros de que vendieron muchas revistas, otros de que consiguieron más dinero de lo que se pedía, y muchas cosas más. Para algunos fue la primera vez que difundían en una iglesia y se ponían nerviosos a la hora de presentar Camino, mientras que los veteranos lo presentaban como si nada, como si fuera algo muy fácil.
A la vuelta nos esperaba buenísima noticia. ¡Teníamos para comer macarrones con carne picada! Estaban tan ricos que se terminaron en un segundo. Pero se terminó lo bueno. Algunos tenían que hacer algunos servicios, mientras otros aprovecharon el tiempo echándose la siesta o jugando al baloncesto o lavando la ropa.
Hoy ha sido un día muy costoso a la hora de levantar. Nos hemos levantado a las 6 para hacer una excursión al puerto para ver las lonjas, pero no ha podido ser porque el autobús nos ha dejado colgados, aunque en realidad no es que nos dejara colgados, sino que la empresa de autobuses se pensaba que la excursión iba a ser por la tarde y no por la mañana. Ha sido gracioso.
Después de todo el lío con el autobús hemos estado debatiendo sobre que hacer por la mañana. Algunos querían irse a dormir y otros a pasear ya que un paseo mañanero viene muy bien para despejarse y aún más cuando no se puede dormir. Finalmente algunos se han ido a dormir con su orgullo bien puesto ya que los demás nos hemos ido a desayunar, teniendo unas vistas impresionantes del mar. Al volver al colegio, la mayoría se han ido a dormir porque estaban reventados y necesitaban recuperar sus horas de sueño, mientras que otros valientes se han quedado despiertos (ya que no podían dormir) haciendo compras, leyendo, lavando ropa… Y la cosa es que hasta las doce no se han despertado. Hay gente demasiado marmota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario